El Hablador Mexicano

jueves, 19 de abril de 2007

SARTORI EN MEXICO

Por aquí anda Giovanni Sartori (próximo honoris causa de la Universidad Nacional), cierto que es un experto teórico en democracia y esas cosas pero anda un poco errado en lo que toca a la situacion en el país. Por ejemplo, propuso que los diputados se religieran para de ese modo poderlos premiar y castigar. Estimado profesor: le recuerdo que la reelección de legisladores es una realidad cotidiana, que lo que propuso el Constitucionalista en 1917 desde hace mucho se fue a la tumba (el famoso no reelección, qe todavía aparece inútilmente en la papelería oficial), que tenemos próceres que saltan de la Cámara baja a otra más baja aún, de las locales a la federal y viceversa (hay unos que llevan veinte años en eso). También le comento que ellos mismos se encargan de premiarse con gordas dietas de cientos de miles de pesos en un país con 47% de pobres (no lo digo yo, sino la Secretaria de Desarrollo Social), pero que el más puro y alto ejemplo lo dan nuestros ínclitos Magistrados, los del Tribunal Supremo, con sueldos mensuales cercanos al millón de pesos (cierto, son lágrimas de cocodrilo, naderías, después de conocer que la fortuna del prohombre Slim ronda los chorrocientos mil millones de dolares y que solo en dos meses su fortuna aumento 44 mil millones de pesos). Finalmente, estimado Giovanni, aciertas en una cosa, en eso de que podría castigarse a los legisladores que no funcionen pero no con el pétalo de un voto en contra, no mi estimado, no, sino con el paredón, que en épocas ilustres de nuestra historia dio tan buenos ejemplos de su aficacia.

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